La Victoria en el planisferio Salviati: cómo y por qué

Los dos navíos dibujados en el planisferio Salvati son probablemente las representaciones gráficas más antiguas de la nao Victoria que se conservan. Como estas imágenes han sido poco estudiadas hasta ahora, dejo aquí unas observaciones.

El planisferio Salviati no tiene fecha ni firma pero lleva bien visible el blasón del cardenal Giovanni Salviati. Como legado apostólico en España, Salviati asistió a la boda del emperador Carlos V en Sevilla en 1526. Por ello, se suele datar el planisferio de ese año.

Volviendo a los dibujos de la Victoria, la primera observación es que en el mapa no aparece el nombre de la embarcación, pero sí una leyenda al lado de cada nave que la identifica sin lugar a duda:

Hec ratis e quinque est totum que circuit orbem

Esta frase se había traducido hasta ahora como “esta nave es una de las cinco que circundaron el orbe”.[1] Sin embargo, creo que hay un pequeño error gramatical en esa traducción. Yo propongo: “esta nave es, de entre cinco, la que circundó todo el orbe”. Con este pequeño cambio, ya no hace falta suponer que el autor del planisferio Salviati ignorase que solo una de las cinco naves de la armada de Maluco había dado la vuelta al mundo.

¿Por qué no cita el autor del mapa el nombre de la nave en la leyenda? Es difícil responder con certeza porque no sabemos quién fue. Sin embargo, sí se puede afirmar que la fuente principal sobre el viaje de Magallanes y Elcano en los años posteriores a 1522 tampoco mencionaba el nombre de la Victoria. Me refiero al De Moluccis Insulis de Maximiliano Transilvano, redactado en Valladolid poco después de llegar allí Elcano y sus compañeros, y publicado en varias ediciones impresas a lo largo de 1523. Es verdad que se enviaron otras cartas desde Valladolid en 1522 (las de Pedro Mártir de Anglería y Gasparo Contarini) que sí daban el nombre de la nave pero no fueron publicadas hasta la década siguiente.

Y por último, ¿por qué usar la imagen de un barco para representar la circunnavegación? Más aun, la leyenda del planisferio Salviati dice que es la nave la que ha dado la vuelta al mundo, no su capitán ni su tripulación. La «agencia», como se dice ahora, se atribuye a un objeto inanimado.

El autor del mapa podría haber acudido a otros símbolos: una efigie de Elcano o de Magallanes, como hicieron los que años después exaltaron la vuelta al mundo de Drake (véase el mapa de aquí abajo). O la ruta seguida por la expedición, que sí se plasmará en mapas a partir de 1530; o algún producto exótico como el clavo… De hecho, en los mapas de aquella época los descubrimientos de las Antillas o de Brasil no se solían representar mediante una embarcación.

De nuevo, puede deberse a la influencia del texto de Transilvano. Este cortesano silenció a Elcano, al que citó solo de pasada como “el capitán de la nave”, sin decir su nombre. Tampoco dejó un relato lo suficientemente preciso desde el punto de vista geográfico como para poder reconstruir el itinerario. Por el contrario, sí que exaltó al navío circunnavegador, del que dijo que merecía un sitio entre las estrellas: “Navis autem ipsa multo dignior, ut inter sydera collocetur, quam vetus illa Argo”.

Anónima pero clave para el éxito de la expedición, así fue la imagen de la Victoria que difundió Transilvano y así fue como la representó el desconocido autor del planisferio Salviati.


[1] “This ship is one of five that circled the earth” según Sandman, Alison. «Spanish Nautical Cartography in the Renaissance». En Cartography in the European Renaissance, editado por David Woodward, 3:1095-1142. The History of Cartography. University of Chicago Press, 2007.

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